XXV
<<En primavera, suelo ir a sentarme a la riba de un campo florecido. Cuando una esbelta doncella me ofrece su cáliz de vino, no pienso para nada en mi salud. En verdad, valdría menos que un perro si tuviese tan grosera preocupación. (Omar Khayyaham,1050- 1122)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Espero comentarios de quienes leen. las frases.